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jueves, 8 de febrero de 2018

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Próxima la confluencia de los límites con las provincias de Cádiz y Málaga, a 100 kilómetros de la ciudad de Sevilla. el pueblo de Algámitas responde a las características propias de los pueblos esparcidos por la sierra sur; la riqueza y la variedad de su entorno natural se eleva hasta 423 m. sobre el nivel del mar, siendo el corbones el más importante de los cursos fluviales del lugar. Los orígenes de esta hermosa localidad serrana se remontan, quizás, a la época de expansión fenicia por todo el valle del Guadalquivir. Tanto la sierra “El Tablón” como el peñón “El Terril” son visibles desde el mar, sirviendo como punto de referencia a los navegantes y adquiriendo, además, un valor adicional por su estratégica ubicación y su inmejorable perspectiva: ello despertó el interés de las distintas civilizaciones por establecerse en este enclave.

Asentamientos prehistóricos

El Peñón de Algámitas debía haberse habitado ya en tiempos prehistóricos, dada la existencia de cavernas y restos arqueológicos. En todo caso esta superficie rocosa representa uno de los accidentes topográficos más singulares y destacados de la provincia de Sevilla, determinando incluso el nombre del pueblo. Así parece ser que Algámitas primero se llamó sílice por el nombre del río sílice (hoy río Corbones). Algámitas debe su denominación a la voz hebraica halgami, que significa “peña”. También a esta zona del peñón se le llamo las carboneras por ser lugar donde hacían el carbón, quedando señales de su existencia en la zona (explanadas, refugios y corrales hechos de piedra, lugar donde luego de refugiaron los bandoleros)desde tiempo inmemorial y aún en estas fechas se oye comentar a los mayores sobre la existencia de un bandolero apodado cencerrito se cuenta del valiente personaje que en sus andanzas por la serranía de ronda, repartía los bienes que afanaba a los protestados de la época, para paliar las necesidades más básicas de las familias, que por aquellos tiempos poblaban estos terrenos. Teniendo como uno de los refugios más importantes para guarecerse durante sus persecuciones por las autoridades civiles y militares, de aquellos años, la cueva denominada de san Doroteo y la cima de la sierrezuela, (denominada hoy medio pollo”) ubicados ambos refugios a pocos metros del Complejo Rural El peñón



Algunas de las características físico territorial del peñón y la sierra



Alomados relieves y pronunciadas montañas forman nuestra sierra sur. esta serie de montañas, constituidas por la sierra de estepa, la del tablón, sierra vaquera, la sierra de esparteros y la sierra de Montellano, se elevan en la subbética andaluza, zona en la que la gran cordillera bética establece contacto con la depresión del Guadalquivir. El paisaje y la propia personalidad de la sierra son claras expresiones de los materiales que la forman: arcillas y margas, ambas con abundantes sales, yesos y rocas calizas. y, en efecto, el distinto grado de resistencia que presentan estos materiales ha permitido que se produzca una erosión diferencial, es decir, que tras estar sometidas a la acción atmosférica y del agua durante varios millones de años, las rocas menos resistentes, las arcillas y yesos, se han erosionado más que las rocas calizas. Al recorrer este territorio encontramos, por ello, una serie de formas alomadas y valles, que son de naturaleza arcillosa y elevados macizos de rocas calizas. La erosión ha acentuado las diferencias de altura entre estas zonas de tan diferente naturaleza geológica. Todas estas rocas, tanto las arcillosas como las calizas, se formaron en los fondos marinos que existían en la era secundaria y, posteriormente, como consecuencia de movimientos continentales, fueron plegadadas y elevadas durante la era terciaria hasta que, al emerger del mar, formaron la sierra. Es un relieve más joven que el de la sierra norte y, por tanto, ha estado sometido a los procesos de erosión durante mucho menos tiempo. Su desgaste ha sido menor y resulta por ello lógico que, aquí, se encuentren las zonas más elevadas de la provincia. Partiendo de Algámitas, a lo largo de la carretera que conduce hasta pruna, la sierra sur constituye paisajes de enorme belleza. En la sierra del tablón, inconfundible por sus pronunciados relieves, alcanzamos el puerto de zamorano, que separa el peñón con 1.129 m. de la sierra con 1.100 m. Su interés radica en la de ser el punto más elevado de la sierra sur y de la provincia de Sevilla con un bosque y matorral de montaña conservado con especies endémicas y especies amenazadas o raras que sirven de refugio de animales.



Interés didáctico, paisaje y fragilidad



El paisaje y las formas del secundario tienen una función recreativa y didáctica de especial importancia para los habitantes de los pueblos cercanos y alumnos visitantes, porque muestra un macizo fallado en su sector occidental que da lugar a escalpes pronunciados. Es además representativo del matorral subbético, en especial en dos zonas que corresponden a las más altas, si bien el pastoreo excesivo y el fuego, pueden poner en peligro el ecosistema formado. Su fragilidad es media y la protección de los suelos merece destacarse como prioridad en la conservación. Desde el Complejo distintos senderos permiten ascender por la montaña. Desde sus cotas medias podemos ver gran parte de la provincia. encinas, cornicabras, majoletos, acebuches, jaras, matagallos, palmitos, esparragueras y otras especies, forman el monte que coloniza estas vertientes. en las zonas más elevadas, expuestas a los abrasivos agentes atmosféricos, la vegetación arbórea y arbustiva desaparece al ascender por estas laderas aparecen con toda claridad los efectos del agua sobre las rocas calizas que forman el relieve: afiladas crestas y agujeros de las formas más caprichosas constituyen la superficie de las rocas. gran parte del macizo está recorrido por cuevas que almacenan el agua que se infiltra desde la superficie. Algámitas, y otros núcleos urbanos próximos, se abastecen, precisamente, del agua que contiene la montaña. mientras que el necesario líquido permanece en el interior, escondidas y hermosas plantas viven en las grietas del roquedo.